Se estaría ante un escenario de una cosecha récord de maíz

Si se consolida la actual tendencia de aumento de superficie con una ganancia de, por lo menos, 500 mil hectáreas, se estaría ante un escenario de una cosecha récord de maíz. Antes del informe del Usda, que se conoció esta semana, el mercado ya empezaba a dar signos de recuperación.

La fuerte baja de precios que se produjo durante septiembre generó un efecto bumerán en la demanda. ¿Cómo no entrar al mercado con estos precios tan atractivos y casi de liquidación?. La baja se produjo por la salida en estampida de los fondos que vieron en la crisis europea un reflejo de lo que sucedió en Estados Unidos hacia fines de 2008.

Muchos deben estar pensando el timing errado de desarmar sus posiciones y compraron el efecto pánico que generaban las noticias desde Europa. Ahora vemos que la soja ha recuperado buena parte de las pérdidas, a punto tal que ayer, la posición mayo 2012 estaba cotizando en el Amtba a 304 dólares por tonelada luego de haber tocado el mínimo en lo que va del año, con 288 dólares una semana atrás.

Decíamos en anteriores columnas que en toda soja arriba de 300 dólares hay que ir pensando en tomar posiciones de cobertura. Y mantenemos el mismo pensamiento: no se trata de salir a vender el 50 por ciento de la cosecha, se trata de abrir el libro de ventas marcando un precio que una semana atrás los productores firmaban por vender toda su cosecha y ahora es muy probable que nadie venda nada.

Es sabido que los productores nunca comercializan en suba; siempre venden en la baja. Y si en esta oportunidad no lo hicieron fue porque la magnitud de la caída los sorprendió, todavía seguía la sequía, la lluvia no había llegado y muchos tomaron la precaución de no comprometer algo que todavía no sabían si podían sembrar. Ahora las lluvias vinieron y los mercados se recuperaron, ganando casi la mitad de lo que habían perdido.

Maíz
La recuperación no fue tan fuerte como la que tuvo la soja, pero fue suficiente para ir pensando de nuevo en un año de buena rentabilidad. El cierre de la posición abril se acercaba a los 172 dólares por tonelada, luego de haber visto mínimos de 163 dólares una semana atrás. El mercado de maíz disponible, a 144 dólares, sigue sufriendo el efecto de los ROE que no aparecen por ser parte de la estrategia del secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno.

Analizando los pases del mercado entre el futuro abril y la posición disponible, están indicando una tasa de 21 por ciento por los próximos seis meses. Si anualizamos los pases financieros actuales, estamos ante una tasa de 42 por ciento, imposible de imaginar en cualquier país normal.

Esta tasa anual cubre cualquier costo de almacenaje o financiero para tomar warrants e incluso da sustento a ventas forward de maíz nuevo. Este es entonces el momento de vender maíz futuro abril 2012 o forward , y cumplir luego el contrato con la entrega de maíz disponible de la cosecha actual.

El riesgo que vemos para la nueva campaña Si se consolida la actual tendencia de aumento de superficie con una ganancia de, por lo menos, 500 mil hectáreas, estaríamos ante un
escenario de una cosecha récord, que podría superar los 30 millones de toneladas. Con este nivel de producción es altamente previsible tener un saldo exportable de unos 20 millones de toneladas. Si el Gobierno sigue en 2012 con la misma política de restringir las exportaciones, es altamente probable que haya una fuerte baja en los precios de nuestro mercado interno de maíz disponible, como la que hemos visto en estos últimos meses. Es por este motivo que sugerimos la venta de maíz futuro nueva cosecha y asegurarnos de esta forma un nivel de precio para el maíz disponible que arroje un más que razonable margen de rentabilidad. Esta situación que estamos planteando es inédita en nuestra historia reciente, vender maíz futuro para asegurar el precio del maíz disponible vieja cosecha.

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Los trigos requieren una lluvia importante en los próximos días

La situación de los trigos muestra un gradiente de Este a Oeste. En Entre Ríos y en el nordeste de Buenos Aires las variedades de ciclo largo desarrollaron bien y se encaminan a la floración en buenas condiciones, pero con una disponibilidad de humedad ajustada en el suelo.

En Santa Fe y en el oeste de Buenos Aires la situación es aún más complicada, con cultivos que detuvieron su crecimiento desde fines de agosto y que requieren agua muy pronto para no comprometer su potencial de rinde por menor formación y desarrollo de espigas.

Los trigos de Córdoba y de gran parte de La Pampa sufren severas restricciones de humedad, que determinan que los productores ya estén pensando en mermas en los resultados finales por obtener,

Julio Lieutier, asesor del CREA Seguí-La Oriental, en el norte de Buenos Aires, afirma «que hubo trigos que se sembraron con suelos con buen barbecho y suficiente humedad, y otros con el perfil medio lleno. Estos últimos entrarán a una situación crítica si no llueva próximamente, porque a partir de ahora comienza un gran consumo de humedad como consecuencia de la encañazón.

La situación climática no es la única preocupación de los productores. A diferencia del maíz y de la soja, el mercado internacional del trigo está bastante encalmado por muy buenas producciones en los países exportadores.

«Hubo una excepcional cosecha en Rusia, que le permitirá exportar 20 millones de toneladas en 2011 contra 3, 5 millones del año pasado, y eso desbalanceó el mercado, sepultó los precios y aseguró trigo barato en el mundo», afirma Sebastián Olivero, de la consultora Agro Tecei. «Las producciones de Ucrania, EE.UU. y de Canadá también resultaron normales y eso asegura suficientes stocks en EE.UU. y en el mundo, que le ponen un techo a cualquier intento alcista de precios», agrega.

En el plano interno, la aparición de algunos ROE permitió vender partidas que no tenían compradores. «El panorama sigue siendo complicado para el trigo, pero en los últimos días se observó alguna actividad de los exportadores, que no repercutió sobre los precios pero sí sobre la fluidez de los negocios», añade Olivero. Los precios que se obtienen hoy son menores a los de la época inmediatamente posterior a la cosecha.

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